Dado que las mujeres más jóvenes tienen menos probabilidades de desarrollar cáncer de mama, es habitual sentirse sola durante el tratamiento. Nuestros especialistas ofrecen una variedad de servicios y estrategias para ayudar.
Asesoramiento y pruebas genéticas
Las pruebas genéticas se recomiendan para todas las personas menores de 45 años que fueron diagnosticadas con cáncer de mama para asegurarse de que la enfermedad no es hereditaria. Ofrecemos realizar las pruebas directamente en nuestros centros oncológicos el primer día que usted acude a nuestras clínicas. Eso es muy práctico, pero también muy importante porque los resultados se obtienen sin demora. Recibir esos resultados cuanto antes nos permite recomendarle el tratamiento más adecuado para su tipo de cáncer lo antes posible.
Preservación de la fertilidad
Si la planificación familiar está contemplada en su futuro, es importante tener una conversación sobre cómo preservar su potencial reeproductivo antes de iniciar el tratamiento. El tratamiento contra el cáncer, como las terapias de bloqueo hormonal, puede retrasar la maternidad por hasta cinco años. La quimioterapia puede afectar la calidad de sus óvulos, lo que puede repercutir en las posibilidades de quedar embarazada. Nuestros especialistas en fertilidad se reúnen con usted para conversar sobre sus opciones, incluida la extracción de óvulos antes de iniciar el tratamiento para garantizar que sean de la máxima calidad y recurrir a la fecundación in vitro (FIV) cuando llegue el momento.