Acerca de parálisis cerebral
La parálisis cerebral (parálisis cerebral) afecta el tono muscular, el movimiento y las habilidades motoras. Generalmente, se debe a una lesión cerebral o a una malformación cerebral que ocurre antes o durante el nacimiento o en las primeras etapas del desarrollo. La parálisis cerebral a menudo causa espasticidad, rigidez muscular que a veces se acompaña de movimientos bruscos, que puede afectar los brazos, las piernas, el cuello, el pecho, el abdomen y/o la cara del niño. Los niños con CP pueden tener problemas asociados con audición, visión, convulsiones, aprendizaje, atención, hiperactividad y cognición.
Si su hijo tiene o puede tener PC
El primer paso es una evaluación completa. Nuestros médicos realizarán un examen físico, conocerán la historia clínica de su hijo y revisarán las imágenes de resonancia magnética del cerebro y, en algunos casos, de la columna vertebral. Es posible que el niño también necesite análisis de sangre u otras pruebas de diagnóstico para identificar causas posibles de los síntomas. Nuestros médicos también evaluarán a su hijo para detectar afecciones que pueden ocurrir con parálisis cerebral, como convulsiones, escoliosis, contracturas (tensión muscular), reflujo ácido y problemas para dormir, y harán derivaciones a especialistas según sea necesario. El proveedor de atención primaria de su hijo continuará abordando los problemas médicos preventivos y de atención primaria, y formará parte del equipo de atención integral de su hijo.
Atención integral para parálisis cerebral y afecciones relacionadas
Entendemos el impacto que la parálisis cerebral y afecciones similares pueden tener en su hijo y su familia. Nuestro equipo de especialistas ofrece atención integral adaptada a las necesidades físicas, de desarrollo, emocionales y académicas únicas de la niñez.
Rehabilitación (especialista en fisiatría)
Un especialista en fisiatría se enfoca en la función física de su hijo. Evalúan las capacidades de su hijo y trabajan con usted para establecer objetivos para la rehabilitación y la terapia física. También pueden evaluar y recomendar aparatos ortopédicos y equipos, así como recetar medicamentos o procedimientos para ayudar con la espasticidad u otros problemas.
neurología pediátrica y neurodesarrollo
Un neurodesarrollista pediátrico, especialista en neurología que ha completado una capacitación adicional en el tratamiento de discapacidades que afectan el lenguaje, el movimiento, los sentidos y la cognición, se enfoca en la función neurológica de su hijo. Ayudan a comprender un diagnóstico de parálisis cerebral basado en historia clínica, estudios de imágenes y exámenes, y explican el diagnóstico y cómo puede afectar la función de su hijo. El médico realizará un examen y tratará las afecciones neurológicas relacionadas, ayudará a gestionar el tono muscular y los movimientos no deseados, y abordará las preocupaciones sobre el desarrollo y el aprendizaje. El especialista en neurodesarrollo de su hijo puede brindar atención a su hijo a medida que crece y se convierte en adulto.
Equipo de especialistas
Colaboramos con una variedad de especialistas para asegurar que su hijo reciba atención integral de un equipo coordinado.
Cuando sea necesario, su hijo también puede ser atendido por un trabajador social o referido a especialistas pediátricos en gastroenterología, oftalmología, audiología u ortesis (inserciones en los zapatos que ayudan a corregir problemas al caminar y estar de pie).
Tratamientos para parálisis cerebral y afecciones relacionadas
Medicamentos
Se pueden recetar medicamentos para relajar los músculos de su hijo, reducir los movimientos adicionales/espasticidad, o aliviar el dolor de espasmos musculares. Los medicamentos orales son un enfoque común para manejar el tono muscular.
Inyecciones de toxina botulínica
En algunos niños con parálisis cerebral, las inyecciones de toxina botulínica (botox, Dysport, Xeomin) pueden reducir espasticidad al bloquear las señales nerviosas que causan que los músculos se endurezcan.
Nota: Algunos usos de toxina botulínica para niños se consideran "fuera de etiqueta", pero tanto botox como Dysport tienen indicaciones de la FDA para su uso en niños con espasticidad en las extremidades.
Cirugía
En casos de espasticidad grave, médicos pueden implantar quirúrgicamente una bomba para administrar dosis continuas y constantes de baclofen (un medicamento) directamente a la médula espinal. Otra opción quirúrgica es la rizotomía dorsal selectiva (SDR), que tiene como objetivo reducir la espasticidad cortando las raíces nerviosas de la médula espinal responsables de enviar señales defectuosas. Tanto la implantación de la bomba como las cirugías de SDR pueden ser realizadas por especialista en neurocirugía pediátrica, cuando corresponda. Cirujanos ortopédicos pediátricos pueden realizar procedimientos para mejorar movilidad y función, y prevenir o corregir deformidades. Siempre que sea posible, nuestros cirujanos utilizan enfoques mínimamente invasivos, realizando cirugía a través de pequeñas incisiones para reducir el dolor y el tiempo de recuperación.