Para crear un plan de tratamiento de la epilepsia personalizado, debemos conocer lo máximo posible sobre sus convulsiones, determinar la causa e identificar el foco de las convulsiones, el área del cerebro donde empiezan las convulsiones. Después de que nos llame para coordinar una cita, haremos un trabajo de campo con un seguimiento de sus registros médicos relevantes. Luego, uno de nuestros epileptólogos revisará la información y decidirá si el primer paso es hacer una consulta con un médico o si lo derivará a la unidad especializada de monitoreo de epilepsia. Hay dos etapas principales de evaluación: inicial y quirúrgica.

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Evaluación inicial

La evaluación inicial incluye una revisión de su historia clínica, registros médicos y medicamentos, un examen neurológico, estudios de imágenes y electroencefalografía (EEG).

Electroencefalografía de rutina (EEG​​​​​​​)
Registra las ondas del cerebro mediante electrodos que se colocan en el cuero cabelludo. Mientras se acuesta en una cama, se le pedirá que realice algunas tareas sencillas o que mire una luz intermitente. En la mayoría de los casos, las ondas del cerebro se registran cuando está durmiendo y cuando está despierto. No debería experimentar dolor ni molestias durante esta prueba de una o dos horas.

IRM (imagen por resonancia magnética)
Usa imanes para crear imágenes de alta calidad del cerebro y detectar anomalías que pueden indicar un posible foco de convulsiones. Esta prueba indolora dura aproximadamente entre 30 y 60 minutos.

Electroencefalograma (EEG) ambulatorio
Registra las ondas del cerebro por un período más largo, lo que aumenta las probabilidades de registrar una irregularidad. Al igual que en los EEG de rutina, se colocan los electrodos en el cuero cabelludo, pero se irá a su hogar con los electrodos y una grabadora portátil en miniatura por entre uno y cuatro días. La actividad del cerebro se registra de forma continua. Se le pedirá que presione un botón cuando ocurra una convulsión y que lleve un registro detallado de sus actividades para ayudar a los médicos a obtener más información sobre sus convulsiones.

EEG por video y unidad de monitoreo de epilepsia
Registra las ondas del cerebro en video durante las convulsiones reales, lo que puede ayudar a los médicos con el diagnóstico y la evaluación quirúrgica. Antes y durante la prueba, se suelen reducir o detener los medicamentos anticonvulsivos para aumentar las probabilidades de registrar una convulsión. Ingresará al hospital por entre tres y cinco días y recibirá un monitoreo cercano de nuestra unidad de monitoreo de epilepsia especializada (EMU) que cuenta con un gran equipo que incluye médicos, enfermeros, tecnólogos, entre otras personas. El EEG por video también puede realizarse usando electrodos que se colocan quirúrgicamente en el cerebro. Esto permite un mapeo más preciso del funcionamiento del cerebro y un mayor enfoque en los orígenes de las convulsiones.

Exámenes neurogenéticos
Las investigaciones recientes han demostrado que la epilepsia puede tener un componente genético. Un análisis de sangre puede brindar información a los médicos sobre si su epilepsia es genética, lo que puede afectar su plan de tratamiento. 

Duke University Hospital

Busque la información que necesita para prepararse para su cita.

Evaluación quirúrgica

Si los resultados de su evaluación inicial indican que puede ser un candidato para la cirugía de epilepsia, necesitará realizarse pruebas o procedimientos quirúrgicos adicionales para identificar el foco de las convulsiones.

Imagen por resonancia magnética (IRM) funcional
Es similar a una resonancia magnética estándar, pero también detecta las áreas del cerebro involucradas en funciones particulares y los cambios en el flujo sanguíneo del cerebro. 

Imágenes por tensor de difusión (DTI)
Una resonancia magnética​​​​​​​ muy especializada que se enfoca en la anatomía del cerebro. El escáner de ultra alta resolución de Duke permite que los médicos examinen microestructuras complejas en el cerebro e identifiquen pequeñas anomalías que no podrían verse con una resonancia magnética convencional.

Tomografía por emisión de positrones (PET)
Investiga la actividad química y muestra el metabolismo del cerebro. Antes del examen, se administra un colorante radiactivo mediante una vía intravenosa. Esto destaca las áreas del cerebro donde empiezan las convulsiones.

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Tomografía computarizada por emisión de fotón único (SPECT)
Muestra el flujo sanguíneo y el funcionamiento del cerebro. Como en las tomografías PET, esta prueba requiere una inyección por vía intravenosa de un colorante radiactivo (en este caso, se administra al comienzo de una convulsión), que solo está activo en el cuerpo por un breve período.

EEG de alta densidad y estudios de imágenes de fuente eléctrica (ESI)
Es similar a un EEG de rutina, excepto que se colocan muchos más electrodos en el cuero cabelludo para darles a los médicos aún más información. Los datos obtenidos se analizan con programas computarizados avanzados para determinar no solo dónde empiezan las convulsiones sino cómo se expanden.

Examen neuropsicológico
Los neuropsicólogos realizan entrevistas y le piden que complete rompecabezas, cuestionarios y tareas cronometradas por entre cuatro y seis horas. Comprender las fortalezas y las debilidades ayuda a los médicos a determinar qué partes de su cerebro podrían no funcionar de forma normal. Esto puede ser útil para mejorar su funcionamiento cognitivo y determinar si es elegible para una cirugía de epilepsia.

¿Necesita una segunda opinión?

Nuestros expertos pueden revisar sus registros y comunicarse con usted para analizar un plan de tratamiento eficaz. Llame al 919-385-3223 y nuestro asesor de pacientes lo ayudará a organizar todo para una segunda opinión.

Estereoelectroencefalografía robótica (SEEG)
La SEEG también se usa para detectar dónde empieza la convulsión. Mientras esté con anestesia general, los neurocirujanos guiarán un brazo robótico para que realice pequeños orificios en el cráneo mediante los cuales se colocarán electrodos en el cerebro. Esto demora alrededor de dos horas. Se recuperará fuera del quirófano y permanecerá en el hospital por aproximadamente una semana. Durante este tiempo, los electrodos monitorearán su actividad cerebral para identificar dónde empiezan las convulsiones. Después de determinar un foco de convulsión, los electrodos se extraerán quirúrgicamente, y deberá permanecer en el hospital por dos o tres días para recibir antibióticos. En comparación con una craneotomía (que requiere una apertura más grande en el cráneo), el procedimiento robótico es más rápido y se tolera mejor. La estereoelectroencefalografía es ideal para los casos más difíciles de epilepsia. Junto con la SEEG, los médicos también podrán producir un modelo 3D de su cerebro para comprender mejor dónde se encuentran los electrodos profundos en relación con los otros y en relación con las estructuras importantes del cerebro. 

Electrodos subdurales
Los electrodos subdurales en tiras o mantas se colocan de forma quirúrgica en la superficie del cerebro y se usan cuando es difícil identificar el foco de las convulsiones. Además, su epileptólogo y el neurocirujano pueden usar estos electrodos para activar eléctricamente partes de su cerebro para el mapeo. Como con la estereoelectroencefalografía robótica, el monitoreo se realiza durante varios días para poder registrar las convulsiones. 

Mapeo cerebral
El mapeo cerebral identifica las áreas vitales en el cerebro responsables del movimiento, la sensibilidad, el lenguaje y la visión. Esto reduce el riesgo asociado con la cirugía de epilepsia. Primero, un neurocirujano extraerá una parte del cráneo (una craneotomía​​​​​​) para implantar electrodos en el cerebro mientras esté con anestesia general. Permanecerá uno o dos días en el hospital para poder recuperarse de esta cirugía. Cuando los electrodos estén conectados, el mapeo (que lleva entre una y dos horas) puede realizarse mientras esté despierto o bajo anestesia general, y tanto en el quirófano como en nuestra unidad de monitoreo de epilepsia (EMU) especializada, según las funciones que los médicos estén examinando. En ambos casos, se enviarán breves pulsos eléctricos por los electrodos implantados, lo que puede causar respuestas leves, como una sacudida o un hormigueo en un músculo. Además, temporalmente (por unos segundos) no podrá realizar ciertas tareas, como hablar. 

Prueba de Wada
También conocida como prueba de amobarbital intracarotídeo, se usa para determinar funciones vitales del cerebro entre el lado izquierdo y el lado derecho. Un neurorradiólogo administrará un anestésico de corta duración en la arteria carótida izquierda o derecha, lo que dormirá de forma eficaz un lado del cerebro por unos cinco o diez minutos. Durante este tiempo, los médicos harán preguntas para comprobar el lenguaje, el habla y la memoria. Luego, el procedimiento se repite en el otro lado del cerebro. Todo el procedimiento dura entre dos y tres horas. Después de un breve período de recuperación, debería poder regresar a casa el mismo día.

Centro de epilepsia de nivel 4 - Adultos

Como un centro de epilepsia de nivel 4, Duke Health ofrece el mayor nivel de diagnóstico y tratamientos médicos y quirúrgicos para las personas con epilepsia. Es uno de los motivos por los cuales el programa de neurología y neurocirugía del hospital de la Universidad de Duke es reconocido a nivel nacional y ocupa el puesto más alto en North Carolina según el U.S. News & World Report en 2024-2025.

Esta página se sometió a una revisión médica el 01/10/2024 a cargo de