Residente de Durham supera el dolor de hombro por jugar golf y gana el campeonato del club
Taylor Donner sostiene el trofeo tras ganar el campeonato de su club de golf. Foto cortesía de Taylor Donner.
Cuando un dolor intenso en el hombro y la falta de movilidad amenazaron con poner fin a su prometedora carrera en el golf, Taylor Donner buscó ayuda en Duke. Tras someterse a una cirugía de hombro y a una terapia física diseñada específicamente para golfistas, este residente de Durham, NC, de 36 años, ganó el campeonato de golf de su club y sigue jugando sin dolor.
Dolor de hombro por jugar golf y deportes de movimientos elevados
Donner siempre ha sido una persona activa. Ha practicado natación, béisbol, hockey, tenis, squash y fútbol como portero desde que tiene memoria. Aunque su abuela lo animaba a jugar golf cuando era niño, no comenzó a hacerlo hasta 2018. Quedó claro que tenía talento para el golf, pero tras años practicando deportes que implican movimientos elevados, comenzó a sentir dolor en el hombro, lo que limitaba su swing. La situación empeoró progresivamente. “Sentía dolor cuando golpeaba la pelota y me despertaba todas las mañanas con mucho malestar”, comentó. Siguió jugando a pesar del dolor, con la ayuda de inyecciones de esteroides y terapia física.
La cirugía de hombro alivia el dolor y permite recuperar la amplitud de movimiento
Luego, durante un partido de tenis en 2021, Donner realizó un remate de derecha elevado. “Sentí un crujido y supe que era algo grave”, comentó. Programó una cita con Christopher Klifto, MD, cirujano ortopédico de Duke Health. “La resonancia magnética mostró que Taylor tenía una lesión SLAP considerable, que solo podía repararse con cirugía”, explicó el Dr. Klifto. SLAP son las siglas en inglés de "superior labrum, anterior to posterior" (labrum superior, de adelante hacia atrás). Se refiere a un desgarro del labrum, que es el cartílago que recubre la parte interna de la articulación del hombro, y del bíceps.
En diciembre de 2021, el Dr. Klifto realizó una cirugía de reparación del manguito rotador y una tenodesis de bíceps mediante artroscopia. Gracias a las técnicas mínimamente invasivas que se implementaron, Donner pudo regresar a casa el mismo día. Incapaz de quedarse quieto, estaba ansioso por comenzar la terapia física. “El Dr. Klifto sabía que quería volver al jugar lo antes posible y me dijo: ‘Lo voy a derivar con TJ Moore’”, médico especialista en terapia física para golfistas.
Terapia física diseñada específicamente para golfistas
Moore explicó la diferencia entre la terapia física tradicional y el programa diseñado específicamente para golfistas que se ofrece en Duke. “En comparación con la terapia física estándar, que podría consistir en la rehabilitación del hombro, nuestro programa incluye muchos movimientos específicos en el golf, como ejercicios de rotación del tronco y de movilidad de la cadera. Incorporamos estos ejercicios desde la etapa inicial porque son fundamentales en el golf”, señaló.
Bajo la orientación de Moore, Donner se comprometió por completo con su rehabilitación. “Le pedí a TJ que me exigiera tanto como fuera razonable y seguro”, recordó Donner. Su dedicación dio frutos. Para abril de 2022, ya estaba de vuelta en el campo de golf. “En junio, gané un torneo y logré buenas posiciones en otros dos”, comentó.
Un futuro prometedor en el golf
El equipo médico de Donner en Duke está satisfecho con los resultados y ve con optimismo su futuro. Moore comentó: “Mientras siga trabajando en su movilidad y fuerza, debería poder jugar a un nivel elevado”. El Dr. Klifto coincidió: “Su gran esfuerzo en el trabajo con TJ marcó la diferencia. Por eso se recuperó tan rápido. Ahora puede jugar golf y practicar deportes con movimientos elevados libremente”.
