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Las mujeres y las enfermedades cardíacas: reducir el riesgo

Las enfermedades cardíacas son la principal causa de muerte entre los adultos estadounidenses en la actualidad. De hecho, cada año mueren el doble de mujeres por enfermedad cardíaca que por todos los tipos de cáncer combinados, incluido cáncer de mama. Aprenda a reducir el riesgo de enfermedad cardíaca.
Si bien algunos factores de riesgo son inevitables, como tener antecedentes familiares o personales de problemas de corazón o haber pasado por menopausia, hay muchas medidas que se pueden tomar para reducir las probabilidades de contraer enfermedad cardíaca.
Aquí hay algunos hábitos que puede adoptar para ayudar a garantizar un futuro saludable para el corazón:
- No fume. La American Heart Association señala que el tabaquismo es la causa prevenible más importante de muerte prematura en los Estados Unidos. Los fumadores tienen el doble de riesgo de sufrir un ataque cardíaco que los no fumadores y es más probable que mueran a causa de un ataque cardíaco. Afortunadamente, el riesgo de los fumadores de padecer enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular vuelve a la normalidad solo dos o tres años después de dejar de fumar.
- Hágase un chequeo de colesterol. Solicite un "perfil lipídico simple" que muestre niveles de HDL (lipoproteína de alta densidad), LDL (lipoproteína de baja densidad) y triglicéridos. Si tiene demasiados LDL (también llamados colesterol "malo"), eso puede contribuir a bloqueos en las arterias. El HDL, o colesterol "bueno", puede ayudar a transportar el colesterol lejos de las arterias y sacarlo del cuerpo. El tabaquismo, la inactividad física y la obesidad pueden reducir el nivel de HDL. Y tener un nivel de triglicéridos consistentemente alto puede señalar un mayor riesgo de enfermedad cardíaca. El objetivo es tener LDL bajo (por debajo de 130), HDL alto (por encima de 50) y triglicéridos bajos (por debajo de 200). Si sus números no están en el rango saludable, consulte con su proveedor de atención médica para recibir orientación sobre cómo alcanzarlo.
- Hágase revisar la presión arterial regularmente. La presión arterial alta hace que el corazón trabaje más, lo que eventualmente conduce al agrandamiento y debilitamiento del músculo cardíaco. Además, la acumulación de grasa y colesterol en las arterias se acelera y las arterias se endurecen, aumentando las posibilidades de desarrollar un ataque cardíaco o accidente cerebrovascular. La presión arterial alta generalmente no produce síntomas hasta que el daño ya está hecho, por lo que es importante monitorearse. La presión arterial se considera alta si es de 135 sobre 85 o más, y límite si es de 130 a 135 sobre 80 a 85.
- Baje de peso si es necesario. La obesidad exacerba otros factores de riesgo, como presión arterial alta y colesterol alto. Para determinar si tiene obesidad, multiplique su peso en libras por 705, divídalo por su altura en pulgadas y luego nuevamente por su altura en pulgadas. Esta lectura se denomina "índice de masa corporal". Si su IMC está entre 25 y 29, tiene sobrepeso; más de 30 se considera obesidad.
- Hago ejercicio físico regularmente. Los estudios demuestran que incluso el ejercicio moderado, como caminar durante media hora al día, reduce el riesgo de enfermedad cardíaca al mejorar la circulación, optimizar el uso eficiente de grasas y azúcares, y ayudar a disminuir la presión arterial y los niveles de colesterol. Haga ejercicio al menos tres o cuatro veces a la semana en un horario regular durante al menos 30 a 40 minutos cada vez.
- Reduce el estrés. El cuerpo responde al estrés aumentando la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Esto significa que el corazón tiene que trabajar más. Con el tiempo, niveles altos de estrés pueden afectar la salud. Si el estrés es un problema, pruebe hacer ejercicio o técnicas de relajación.
- Pregunte a su médico sobre las modificaciones del estilo de vida que son más adecuadas para su perfil de corazón. Esto no es solo sabiduría popular: las personas que siguen las cinco recomendaciones principales de estilo de vida tienen una reducción del 85 por ciento en su riesgo de enfermedad cardíaca en comparación con quienes no lo hacen. Incorpore buenos hábitos en su vida y estará en buen camino hacia un corazón saludable.