Una opción quirúrgica alternativa para los desgarros graves del manguito rotador

El hombro es una articulación esferoidea. El manguito rotador es un grupo de tendones y músculos que mantienen centrado el hueso de la parte superior del brazo en la cavidad del hombro. También ayuda a levantar y rotar el brazo.

Cuando el manguito rotador se desgarra, ya sea por una lesión repentina o por un desgaste prolongado, el dolor y la debilidad pueden dificultar algunas tareas sencillas con movimientos por encima de la cabeza, como lavarse el cabello o guardar los platos. Si los tratamientos no quirúrgicos, como los medicamentos y la terapia física, no surten efecto, los médicos pueden reparar los desgarros moderados con cirugía. Pero hasta hace poco había pocas opciones para reparar los desgarros más graves del manguito rotador. Una opción, la cirugía de reemplazo invertido de hombro, aún limita las actividades después de la cirugía y puede que no dure más de 15 años. Por este motivo, los cirujanos ortopédicos suelen reservar esta opción para los pacientes mayores de 70, que son relativamente inactivos.

En los últimos años, los especialistas en hombro de Duke han empezado a ofrecer una técnica más novedosa para reparar desgarros graves del manguito rotador: la reconstrucción de la cápsula superior. Con este método, el cirujano inserta un injerto de tejido humano fijando un extremo al hueso de la parte superior del brazo y el otro a la cavidad del hombro. Este injerto no reemplaza el tendón del manguito rotador, pero cumple una función similar: mantener el extremo del hueso del brazo centrado en la cavidad del hombro y ayudarle a levantar el brazo.

Los médicos realizan la cirugía por artroscopia, introduciendo una cámara telescópica e instrumentos quirúrgicos a través de pequeñas incisiones del ancho de un dedo. Se utiliza anestesia regional y sedación, y la mayoría de los pacientes regresan a casa el mismo día.

Jocelyn Wittstein, MD, una de las pocas cirujanas ortopédicas de Duke que realiza esta técnica exigente, comentó que a la mayoría de los pacientes les va bien. "El dolor disminuye de inmediato y están muy satisfechos con el aumento de su rango de movimiento", dijo. "El alivio del dolor nocturno es el beneficio más predecible de esta cirugía".

Tally Lassiter, MD, MHA, otro cirujano ortopédico de Duke que realiza este procedimiento, añadió: "Hemos realizado reconstrucciones de la cápsula superior en este país por más de cuatro años, y los resultados a corto plazo son de buenos a excelentes en aproximadamente el 75% de los pacientes, sobre todo en el alivio del dolor".

La Dra. Wittstein señala que las personas que se someten a una reconstrucción superior de la cápsula suelen tener menos dolor después de la cirugía que aquellas que han tenido una cirugía de reparación del manguito rotador convencional. Sin embargo, la terapia física y el retorno a las actividades normales requieren más tiempo y son más graduales. Y es que debe pasar un tiempo prudente para que el injerto se incorpore al resto de la articulación del hombro. "Lo protegemos de las cargas pesadas hasta unos seis meses después de la cirugía, para que el injerto cicatrice", explicó la Dra. Wittstein.

Con el tiempo, la mayoría de los pacientes pueden levantar el brazo nuevamente. La Dra. Wittstein advierte que no todo el mundo recupera el rango de movimiento por completo, pero la mejoría suele ser significativa.

Si le han dicho que su desgarro del manguito rotador es tan grave que no puede repararse, esta opción puede restablecer su movilidad y aliviar el dolor. También puede ser candidato si se sometió a una cirugía de reparación del manguito rotador y no se recuperó correctamente. Sin embargo, la Dra. Wittstein señaló que la reconstrucción de la cápsula superior no servirá de nada si también presenta artritis pronunciada en el hombro. En este caso, puede recomendarse el reemplazo invertido de hombro. Tal como su nombre lo indica, es una forma de reemplazo de hombro en la que se invierte la articulación. Se coloca una bola donde normalmente se sitúa la cavidad del hombro y se acopla una cavidad arriba del hueso de la parte superior del brazo. Esto le permite usar músculos diferentes, en lugar de los del manguito rotador, para mover y rotar el brazo.

"Los reemplazos invertidos de hombro son una buena opción para pacientes mayores de 70 años con desgarros grandes y artritis pronunciada que no tienen actividades diarias que requieran levantar más de 25 libras por encima de la cabeza", recalcó el Dr. Lassiter. "Para pacientes más jóvenes o más activos que no tienen artritis, la reconstrucción de la cápsula superior es una buena opción".

En muchos casos, comentó la Dra. Wittstein, ella inicia la cirugía intentando reparar el tendón roto del manguito rotador, y la reconstrucción de la cápsula superior es una opción de respaldo previamente acordada con el paciente. "Si el tendón es sorpresivamente flexible y más móvil de lo que sugerían los estudios de imágenes preoperatorios, todavía podemos hacer una reparación primaria", añadió. "Así que tenemos un plan para lo que esperamos, pero en los casos ambiguos, podemos tomar la decisión una vez que inicia la cirugía".

Además de aliviar el dolor y mejorar la movilidad, la reconstrucción de la cápsula superior también puede evitar que los problemas del hombro empeoren. Cuando no se repara un desgarro del manguito rotador, la parte esférica de la articulación suele desplazarse hacia arriba en la cavidad, lo cual provoca artritis con el tiempo. La reconstrucción de la cápsula superior restablece la alineación de la articulación del hombro y normaliza su mecánica, y esto puede ralentizar la progresión de la afección.