Después del diagnóstico y el tratamiento del cáncer de mama: "Siento que puedo hacer cualquier cosa"

Sabía que el Duke Cancer Institute, conocido por su atención a mujeres jóvenes con cáncer de mama , era el lugar adecuado cuando se enteró de su enfoque para las visitas de clínica. Es decir, cuando llegó al Centro Oncológico de Duke, solo hizo una parada. En lugar de pasar el día yendo a ver a su oncólogo médico, a su oncólogo de radioterapia y a su cirujano, todos sus médicos acudían a ella. Uno tras otro, los especialistas llamaron a la puerta de su sala de examen para darle información y analizar sus opciones.

"Se toman el tiempo que necesitas para analizar todas las opciones posibles, de modo que sepas que estás tomando las decisiones correctas", dijo Greene.

Soltera, sin hijos y lidiando con decisiones que normalmente se enfrentan en la mediana edad, Greene dijo que se ha sentido reconfortada por la atención que recibió de la especialista en cáncer de mama Kim Blackwell, MD, y por la gran cantidad de información que recibió en su primera cita.

"Hay mucho que aprender, especialmente sobre los recursos de apoyo. En lugar de manejar las cosas yo misma, como lo hice al principio, ahora me estoy acercando, encontrando personas de mi edad con el mismo tipo de problemas", dijo.

La atención que recibe en Duke es cómoda y reconfortante, afirmó. "No te sientes como si estuvieras en un lugar que es solo para personas enfermas. Mi sala de tratamiento es como un spa".

Negándose a dejar que el cáncer la detenga, Greene se apega a su plan de correr carreras largas en los 50 estados y tal vez incluso en países extranjeros. Su última media maratón, la octava, fue la Rock and Roll Marathon en Washington, DC. Espera correr pronto en Irlanda.

"Para mí, el cáncer es solo un punto en el mapa", dice. Gracias al apoyo que recibo de amistades y profesionales de atención médica, y a los tratamientos que he recibido hasta ahora, realmente siento que puedo hacer cualquier cosa.