Ya no se recomienda el uso de protectores de plomo para las radiografías de rutina
Duke Health se "deshace del plomo" para preservar la seguridad en los estudios de imágenes

Los avances en los equipos ahora permiten realizar algunos estudios de imágenes de manera segura y sin protección.
De acuerdo con Robert Reiman, MD, especialista en riesgos de radiación de Duke Health, los expertos médicos ahora saben que proteger los órganos reproductores de los pacientes durante los estudios de imágenes de rutina no solo es innecesario, sino que puede aumentar el riesgo de exposición a la radiación. Por eso, a partir de octubre, dejarán de utilizarse los protectores de plomo en los estudios de imágenes de la mayoría de los pacientes en las clínicas de Duke Health. El cambio, que en Duke llaman “Shed the Lead” (deshacerse del plomo), sigue las recomendaciones del National Council on Radiation Protection and Measurements y de otras organizaciones, entre las que se incluye el American College of Radiology (ACR).
Una breve historia de la protección
Durante más de 70 años, a los radiólogos les ha preocupado el impacto de la radiación de los estudios de imágenes en los órganos reproductivos de los pacientes. En concreto, se creía firmemente que la radiación dañaría los espermatozoides o los óvulos y que los efectos se transmitirían a los futuros hijos. Por lo tanto, se colocaban protectores de plomo sobre los órganos reproductivos de los pacientes durante las radiografías, las tomografías computarizadas y otros estudios de imágenes.
Los equipos modernos emiten menos radiación
Los avances en los equipos ahora permiten realizar estudios de imágenes de manera segura y sin protección. El Dr. Reiman explicó que las clínicas de Duke Health utilizan equipos de última generación para realizar estudios de imágenes, que emiten aproximadamente un 95% menos de radiación que las máquinas antiguas. Las instalaciones de Duke cuentan con la acreditación del Colegio Americano de Radiología (ACR, por sus siglas en inglés), por lo que se brinda el más alto nivel de seguridad y calidad de imagen. Los tomógrafos también se someten a un riguroso control de calidad interno que supera las normas exigentes del ACR.
Problemas con la colocación del protector
Puede resultar difícil colocar los protectores de manera adecuada, sobre todo, en niños pequeños. En muchos casos, se termina cubriendo áreas del cuerpo que el médico debe examinar. En ese caso, es posible que sea necesario repetir el examen, por lo que aumenta la exposición a la radiación. Además, el Dr. Reiman comentó que gran parte de la radiación que reciben los órganos reproductivos durante los estudios de imágenes proviene de la radiación secundaria del haz de radiación que intercepta el tejido corporal. Por lo tanto, no se puede proteger contra esta radiación secundaria.
Alteraciones en los controles automáticos
La mayoría de los equipos modernos para radiografías, tomografías computarizadas y estudios de imágenes determinan de manera automática cuánta radiación se requiere según la parte del cuerpo a examinar. Sin embargo, si se coloca un protector u otro objeto en el trayecto del haz de radiación, se puede alterar el equipo, ya que aumentará de manera drástica la intensidad del haz. Por lo tanto, la radiación que recibe el tejido sin protección aumenta bastante.
Debido a que los pacientes están acostumbrados a usar protectores, el uso se evitará de forma gradual. Si tiene dudas sobre el estudio de imágenes, consulte al técnico en radiación.