Antes de poder recomendarle la cirugía LINX, se reunirá con un equipo de especialistas, entre ellos un gastroenterólogo y un cirujano torácico, para que le realicen una evaluación exhaustiva. Es posible que se someta a una o varias de las siguientes pruebas para determinar la causa de sus síntomas y si LINX es el mejor tratamiento para usted.
Superior Endoscopia
En este procedimiento, el médico inserta un tubo flexible por la boca para examinar el interior del esófago, el estómago y el intestino delgado.
EndoFLIP
Durante la endoscopia, el gastroenterólogo utilizará un aparato para medir las presiones en el interior del esófago y evaluar su capacidad de contracción. Cuando el esófago funciona correctamente, las contracciones coordinadas mueven los alimentos y los líquidos hacia el estómago.
Manometría esofágica
Este procedimiento consiste en la introducción de un tubo fino y flexible llamado catéter a través de la nariz hasta llegar al esófago. Evalúa la motilidad esofágica a través del monitoreo de la fuerza y los patrones de la función muscular del esófago.
Prueba de reflujo esofágico
Se introduce un catéter o sonda en el esófago para determinar la presencia de reflujo y su gravedad.
Ingesta de bario
Se ingiere un líquido de bario que recorre el largo del esófago. Las radiografías muestran cómo se desplaza el bario por el esófago. Esta prueba permite detectar problemas en la estructura del esófago.